miércoles, 15 de febrero de 2017

He preferido olvidarlos, microcuento de ficción de @Ed_M_Undo


Lenín Moreno ingresa al gran salón donde se encuentra el presidente, su antiguo binomio, Rafael Correa. Empuja las ruedas de su silla muy lentamente, como no queriendo llegar a su destino.

El salón está solo iluminado por la luz del proyector que demarca un cuadrado blanco en la pared, junto a una pintura rococó de Simón Bolivar. El presidente alza su voz, le habla como viejos amigos a Lenín, le dice que todo ha salido como habían planeado, que hará que gane en una sola vuelta, que seguirán con su obra, él a la distancia pero guiándolo en cada decisión que deba tomar como nuevo presidente del Ecuador.

"Renuncio Rafael" le dice sin pestañear desde su silla de ruedas. Rafael se levanta y se acerca a él, se agacha y le dice sutílmente en sus rodillas, casi rogándole. "Es demasiado tarde, no hay marcha atrás, estamos a 3 días de las elecciones Lenín, es solo unos nervios, a mi me pasó lo mismo".

"No Rafael, estoy decidido, no continuaré esta farsa". Correa se levanta y en tres zancadas llega a su computadora, mientras la mira concentradamente le habla de espaldas. "Recuerdo como si fuera ayer cuando me contaste como quedaste paralítico Lenín; la lenta recuperación, el dolor constante, el perdón a tus atacantes". "¿Los recuerdas?

"He preferido olvidarlos Rafael".

"Son esos recuerdos los que nos fortalecen Lenín, mira que si ellos no te hubieran metido un balazo por robarte no hubieses llegado tan lejos, ¿o acaso antes de escuchar ese disparo pensaste que un día podrías ser presidente de la república?

"Nunca se me pasó por la cabeza Rafael, pero de todas formas renuncio, no soy la persona para esto".

"Lo siento Lenín pero yo soy la persona que te ha impulsado desde el inicio y sé que te puedo hacer preidente". "Verás, desde hace unos años tengo el único video de tu ataque Lenín, lo conseguí de una cámara de un cajero que todos olvidaron investigar. Yo mismo fui al sitio y pedí una copia". "Necesito que veas de lo que soy capaz. De mi convicción hacia ti". Rafael Correa regresa a verlo a Lenín quien se seca las lágrimas de frustación de recordar el ataque que lo sentó de por vida.

Correa pone play, la única luz del salón muestra un video en el que 2 ladrones encapuchados que apuntan y roban a Lenín Morenoo y a su esposa. Uno de ellos hala el gatillo, Lenín cae al piso, su esposa corre hacia él, se lanza sobre su cuerpo, el otro ladrón sale corriendo. El que disparó contempla a la pareja en el piso. Gira, empieza a caminar hacia el cajero, mira fijamente la cámara que graba, su pistola aún tiene humo del disparo. Cuando está a un par de metros, se saca la máscara, es Rafael Correa, más joven, con una mirada demente.

Lenín grita de terror, Correa detiene el video en su rostro congelado en la pantalla, se gira y se vuelve a arrodillar, lo mira fijamente a los ojos mientras Lenín tiembla y llora en su silla de ruedas, se escuchan gotas del orine que cae de su asiento.

¿Ahora entiendes de lo que soy capaz por hacerte presidente?