viernes, 24 de marzo de 2017

Desdoblamiento parte1, ficción y testimonio de Ed M. Undo


Sintió que algo se derramó en su interior. Como una leve fiebre en su zona lumbar. Estaba acostado. Abrió sus ojos y pensó que el techo se veía más alto de lo usual. En ese momento entendió lo que estaba ocurriendo. Las 7 almas se habían vuelto a conectar.

Ed M. Undo se sentó en su cama. Su cuello rígido, quizás alguno de los conectantes había sufrido algún ataque. Él sabía que pasaría las horas más angustiantes de su vida. Iba a ver pasar por sus ojos la vida de 6 personas en distintos momentos de su vida. Sería como morir 6 veces seguidas. Iba a necesitar toda la fuerza posible para sobrevivir.

Vió a Virginia correr hacia un árbol al atardecer. Corría con los ojos cerrados. No los ha abierto en 20 años, ya está anciana, muy anciana. Su nieto acaba de caer de la copa de un árbol. Todos saben que está muerto, ella sabe que la muerte no es una frontera sino un nuevo comienzo. Pide que la dejen junto a su cuerpo. Abre sus ojos sobre su cara, sale una luz, no hay forma de describirla. Ella dice que una vez vio a Dios y desde ese día no pudo abrir de nuevo sus ojos, no había nada que valiera la pena ver luego de haberlo visto. El niño abre los ojos, respira, empieza a llorar. Virginia cae muerta a su lado, sus ojos en blanco, su sonrisa de paz.

Undo está acostado con los ojos abiertos viendo el techo. Ya no es un techo sino la galaxia, en espiral, centrífuga. Su alma se espiraliza, entra en contacto con tribus de Moisés. Sus moléculas se evaporan. Ya no es un cuerpo, es una nébula. Sus ojos, dos soles que nacen al otro lado del universo, cuya mirada cuando se posa en el presente ya ha muerto. Sus años son años luz. Su luz es un agujero negro.

Empieza a sentir una leve ansiedad. Mira a Lupo el lobo Molina correr hacia un carro, sus ojos llenos de lágrimas. Un camión pasa junto a él. Sabe que no cuenta con el tiempo pero intentará salvar a la niña. Ha perdido la cuenta de los años que lleva trabajando en el caso del demonio del Cerro. Le ha costado la vida a 700 personas. Está tan cerca de resolverlo, pero descubre que hay fuerzas que han hecho de su investigación una religión. La niña simboliza la salvación de la humanidad. Ha sido raptada por un ser que en apariencia podría ser el demonio, pero Lupo tiene evidencias que dicen lo contrario. No tiene nada que perder. El carro llega a 120 kilómetros por hora, eso significa que el camión va a 150. La lluvia hace todo borroso, el limpiaparabrisas no evacua el agua a la velocidad necesaria. Se abre la puerta, ve al demente sostener a la niña del cuello mientras con un machete apunta a Lupo mientras sonríe. Se cierran las compuertas. El camión hace un brusco giro a la derecha, se sale de la autopista. Se abre una compuerta del camión y empiezan a caer pequeños objetos contra el parabrisas de Lupo, en un momento el vidrio está marcado de sangre. Lupo apaga el limpiaparabrisas. Cae algo grueso, ve piel y un par de dientes, luego caen 3 dedos, parecen arrancados. El demente está mutilando a la niña. Lupo no puede más. Deja de pisar el acelerador. Ve alejarse el camión. El demente es asoma por una de las compuertas y arroja algo que debe ser un pedazo de cuerpo. Lupo no puede más. El zumbido del motor y el vidrio rojo empañan su vida.

Ian Tate y la niña Paz son los últimos en llegar a la salida del laberinto. Sabe que su vida corre peligro y debe hacer todo lo posible por salvarla. Acaban de escapar del submarino en el cual presenciaron la destrucción de la ciudad oculta de Chilampak. Un acto de justicia del cual no encontrará perdón. Ha negociado con el diablo y la negociación no le ha parecido justa. La niña no puede más, Ian la carga para seguir corriendo. Llegan a una compuerta de metal, la abre y casi cae a un silo oscuro. Ingresa y cierra la puerta, necesita tiempo y espacio para realizar una invocación. Dibuja un pentagrama, la niña 7 círculos alrededor, ya saben de memoria como hacerlo, este es su memento. Al terminar el rito, Ian tendrá que abrir la compuerta y buscar un espacio abierto para que su cuerpo sea proyectado astralmente a otro lugar, en otro tiempo, en otra galaxia. Están por lograrlo cuando frente a él se materializa Luzbel, quien le dice que lo ha vuelto a engañar, que ha vuelto a creer en Ian y ha vuelto a fallar. Que tendrá que regresar al infierno por que ha conducido a su novia, la guerrera al averno. Ian pierde la concentración, no culmina la trepidación, trata de atacar al Luzbel pero este lo esquiva, la niña se esconde en un rincón, se tapa los oídos con sus manitas y empieza a cantar la canción que Ian le enseño, la de los árboles siendo brazos que se elevan al cielo, que solo son memoria y nada más. Luzbel se despide y le dice que puede continuar con su teatro y huir, pero que lástima que todo sea tan difícil sin manos, de pronto saca una espada de fuego y le corta las 2 manos a Ian y desaparece. Ian cae al piso desmayado. El fuego a cauterizado las heridas. Se levanta, no logra concatenar las ideas, sabe que podría terminar el ritual, le pide ayuda a Paz para lograrlo. Lo hacen, escuchan los truenos, saben que el portal está abierto cerca, Ian se lanza al piso derrotado, sabe que sin manos no podrá abrir la compuerta, que la niña es demasiado pequeña para lograrlo. Cierra los ojos, pierde la fe. La niña se le acerca, le besa la frente, los labios, le pide perdón por lo que va a hacer. Ian no entiende lo que significa eso. Le dice que no tema, que está seguro que alguien los buscará pronto. Ella le pide un último deseo antes de morir. Ian le dice que no repita eso que van a sobrevivir. Ella le dice que él sobrevivirá, pero ella debe despedirse de su cuerpo para lograrlo. Que ha llegado el momento de cumplir su misión en esta tierra. Con lágrimas en sus ojos Ian le dice que desea. Bésame como la besas a Virginia, no llegaré a la adolescencia ni a la adultez, pero quiero saber que significa ser mujer. Ian cierra sus ojos y le da un beso a la pequeña niñita, ella lo toma de la cara, le muerde un labio. Él empieza a llorar y sollozar, le grita que lo perdone. Que lo deje morir, que no lo haga. Ella camina lentamente hacia la pared, se acuclilla, parece que va a rezar. Su frente topa la pared. Su cuerpo se dobla hacia atrás en una contorsión inhumana. Con violencia su frente golpea la pared. Una y otra vez hasta que está cubierta de sangre. Ya sin fuerzas su cuerpo se desploma, hay un agujero en su frente. De pronto sus manitas que parecen de un títere se levantan y dedos se meten a su frente, su cráneo partido, sus sesos esparcidos. Con fuerza el agujero se agranda, pierde la forma humana. Sale una mano inmensa, gigante, tosca, áspera. Le sigue un brazo enervado, muscular. Empieza a salir mientras el cuerpo de la niña queda destrozado. Ian no puede creer lo que ve. Rumiñahui acaba de renacer frente a sus ojos. Mirada demoníaca, fuerza de leviatán. Corre contra la compuerta y la arranca del silo. Agarra a Ian de la cintura y se lo lleva corriendo. Paz le ha dado paso a la guerra.

Ed M. Undo no puede más y se desmaya. A pesar que faltan 3 historias, la noche será gentil con él y dejará que el desdoblamiento continúe cuando despierte.